1988
Casa Misión "Santísima Trinidad".
Ocotepec, Chiapas. MME
La
casa misión santísima Trinidad fue solicitada por Monseñor José Trinidad Sepúlveda.
Las
Hijas de María Auxiliadora salieron de México
el 13 de agosto de 1988 y llegaron a Tuxtla Gutiérrez el trece de agosto de 1988 el día 14
permanecieron allí para asistir a la clausura del año Mariano, el 15 de agosto se dirigieron a
copainalá donde llegaron el día 17, para salir el 18 para ocoptepec, acompañadas por el padre fray
Rafael González Sánchez, O.F.M. párroco
de Copainlá y por las directoras y
hermanas de las tres comunidades
salesianas existentes en Chiapas:
Copainal, Villaflores y Tuxtla Gutiérrez.
Las
fundadoras de la misión fueron: Sor María de los Ángeles Cervantes
Montaño, la Directora Sor Soledad Guerrero Ocampo y Sor Delfina Medina
M.
El
26 de agosto se hizo la apertura oficial
y bendición solemne de la casa.
SDB y FMA NORTE Y SUR; Don Bosco 100 años en México, 1892-1992. México 1994. Pp. 137
“Dile
al Señor que te deje tiempo para
hacerte
Santa y ganarle muchas almas”
M.M
Ocotepec, Chiapas. (1988)
·
Catequesis de niños
·
Grupos de adoradores
·
Grupos de jóvenes
·
Encuentros de catequistas
·
Comunidades que tienen las cooperativas
·
Celebraciones
·
Promotores de salud
·
Promoción humana
·
Visita a las comunidades
Dos hermanas tienen la preparación de los
catequistas y catequesis para niños, no se cuenta con salones especiales, sin
embargo, viven el ambiente de fiesta típico del oratorio festivo salesiano. Las
catequesis en su mayoría se dan en zoque.
Los grupos de jóvenes se les da clases de Biblia,
protestantismo, historia de México, Liturgia, etc.
En las cooperativas asesoradas por las hermanas se
hacen reflexiones sobre la palabra de Dios y se fomenta el sentido de familia,
religión, recreación y trabajo.
Por medio de la promoción humana se busca que las
personas de riberas se valoren como personas y se promueve la higiene personal
y de las casas.
Durante las visitas a las comunidades se realizan
celebraciones de la palabra con el fin de que la gente goce, al menos un día
del Pan Espiritual.
Por último, se promueven encuentros de catequistas
con el fin de dar impulso al apostolado de los laicos en favor de la gente.
TEJEDA, Ana María y novicias; Las FMA en camino desde hace 100 años. Coacalco, Edo. de México 1994. Pp. 97
Ocotepec, Chiapas es un
Municipio indígena habitado desde hace cientos de años por personas de cultura
y lenguaje “zoque” (etnia mexicana próxima a los mixes), ubicado en la sierra
norte del Estado de Chiapas, a 4 horas de la Ciudad de Tuxtla Gutiérrez.
Hoy el acceso a pesar de
ser muy largo, es más fácil y con mejoras como la carretera pavimentada, pero
hace 29 años que las Hijas de María Auxiliadora llegaron al lugar no estaba en
estas condiciones, recordemos un poco de esta historia y la llegada a Ocotepec.
“A mediados de 1983, Sor
Ángeles Cervantes directora de la casa de Copainalá, visita los poblados del
municipio de Ocotepec; por el mal tiempo tuvo que quedarse a dormir en el
poblado llamado ribera de San Francisco. Mientras anochecía dijo a los
catequistas ¡qué hermoso sería que pudiéramos tener una casita donde quedar a
dormir las hermanas cuando venimos o quizá para quedarnos para siempre!
¿En dónde mero le
gustaría la casita? Sor Ángeles señaló el lugar sin pensar en que se lo
tomarían tan en serio.
Después de un mes el
Padre Agustín (párroco de Copainalá) le dijo a Sor Ángeles: “en la comunidad de
San Francisco, dicen que ya compraron el terreno donde usted mandó construir
una casa para las hermanas”.
La Inspectora Madre
Aurora Mena, va a visitar la comunidad de hermanas en Copainalá y esto lo
aprovechan las personas para entregar las llaves de la nueva casa de las
hermanas.
En 1986, Mons. José
Trinidad Sepúlveda solicitó a Madre Aurora Mena la fundación de una comunidad
de Hijas de María Auxiliadora en la comunidad de Ocotepec, para la
evangelización de toda la región.
El 15 de agosto de 1988
Sor Marinella Castaño, superiora General del Instituto de las Hijas de María
Auxiliadora en ese tiempo erigió canónicamente la Casa de Ocotepec que sería
confiada a la protección de la Santísima Trinidad. En esta casa atenderá a los
siguientes trabajos: EVANGELIZACIÓN, VISITA A LOS PEQUEÑOS POBLADOS Y PROMOCIÓN
HUMANA”.
Han pasado 23 años desde
este hecho y ha sido un proceso largo, duro, pero muy fructífero. Caminar lado
a lado con los indígenas nos ha fortalecido en nuestra misión, que es estar
entre las personas que más lo necesitan, por esta razón hemos fortalecido
nuestro trabajo al crear un Asociación sin fines de lucro que promueva la
educación formal, la asistencia en el patio, proyectos productivos y sea un
hogar para niñas que lo necesitan, un oratorio salesiano como lo hizo Don Bosco
hace más de 150 años.
“Si hubiese tenido cien
veces más fe de la que tengo, hubiera hecho cien veces más de lo que hice” Don Bosco
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