SOR AURORA
MENA
DÉCIMO
TERCERA ANIMADORA PROVINCIAL (1984-1990). Provincia MME
SEGUNDA ANIMADORA PROVINCIAL (1975-1981). Provincia MMO
SEGUNDA ANIMADORA PROVINCIAL (1975-1981). Provincia MMO
Nació en León, Gto. El día 16 de mayo de
1925
Profesó el 5 de agosto de 1946 en North
Haledon, N.J. (USA)
Murió el 31 de marzo del 2002
Rasgos
destacados de su persona:
Mujer optimista, alegre
y serena, lograba contagiar las comunidades de su jovialidad… Supo hacer de estas actitudes un estilo de
personalidad, que configuró su modo de interactuar. Para ella,
el recreo solía ser un momento de fraternidad, animado por las bromas
que propiciaba, por las piezas de folklore al piano que ella interpretaba, por
algún canto o escenificación sorpresa de las hermanas que valoraba y aplaudía…
Su serenidad se manifestaba manteniendo la calma, independientemente de los
eventos o de las maneras en que se le presentaran… Su manera de enfrentarlos
era natural y mesurada, y daba la impresión de que no se trataba de un mero
control exterior, sino que tenía un origen más profundo.
Mujer de Comunión, Sor
Aurora desde joven gozó de la bienaventuranza
que Jesús dirige a los “mansos y
humildes de corazón”, porque poseyó la
tierra del afecto, y de la cordialidad de quienes Dios ponía en su camino….
Seguramente porque ella misma, a su vez quería tanto y tenía una manera
sencilla, peculiar y muy legible para expresar su cariño… Logró cultivar
numerosas, ricas y duraderas amistades.
Delicada, sensible e intuitiva, supo con paciencia e inteligencia, guiar
y acompañar los procesos que encaminan a hacer de Dios el Único Señor de la
vida y a vivir fecunda y gozosamente.
Una “varita mágica” que utilizaba con
auténtica sabiduría del corazón, era la confianza… y cuantas
eran tocadas con ella, respondían con sus mejores recursos. Gustaba de
ir al encuentro y ayudar eficazmente cuando percibía alguna necesidad, muchas
veces sin que se le hubiera
expresado. Así, generosamente abría las
puertas de la casa a familiares y amigos de las hermanas y brindaba diversas ayudas. Si ahora
hiciéramos una recopilación de sus cartas, con seguridad llenaríamos varios tomos,
escribía como un apostolado: con afecto e interés y con grande asiduidad… No olvidamos que guardó siempre un lugar muy
especial para su familia, a quienes entusiasmaba y orientaba, compartiendo de
cerca sus penas y alegrías, siguiéndolos a través de cartas, e.mailes o visitas personales.
Mujer Leal, hizo del amor fidelidad. Inequívocamente, encontraba los motivos para seguir amando, para
comprender, para disculpar… Llegar a ella para abrirle alguna herida, era
llegar a un puerto seguro, del que saldríamos confortadas, orientadas y sin dudar de que guardaría todo en su
corazón… Fue una persona de una rectitud
a toda prueba, franca, sincera y muy libre para decir lo que pensaba con
respeto, y al mismo tiempo, se dejaba abordar y pedir explicaciones. Cuando sentía que había sido demasiado dura, pedía perdón…
Mujer Fuerte, “Madre
Aurora”, tenía un carácter firme y volitivo.
Fue notable en ella el don de gobierno.
Su manera de enfrentar problemas y retos
era directa, rápida y pidiendo colaboración y compromiso. Sirvió como autoridad por 36 años… 24 como Directora y 12 como Provincial
-en las dos provincias mexicanas-. Se
mostró invariablemente enérgica y decidida, y al mismo tiempo, poseedora de una
actitud más bien rara en su tiempo: “disfrutaba del trabajo en equipo”, sus
consejeras, fueron realmente co-rresponsables con ella en las decisiones que se
tomaban… y muchas veces se le oyó decir: “Yo nunca tomé sola una decisión que afectara a la Provincia o a la
Comunidad”.
Mujer de Dios, tenía en
Él el motor que la animaba… el secreto de su fortaleza, del cuidado que se
tomaba de los demás, de su cercanía, de su
lealtad… Era, invariablemente, la
primera en llegar a la oración comunitaria, y no era raro verla que al pasar
por cualquier motivo por la Capilla, llegara a visitar al Señor… La Fe era un Don que cultivó todos los días…
y que marcaba sus pensamientos, y orientaciones, además de sustentar su salesianidad y su amor por el
Instituto…
Sufría cuando veía que las personas no
le daban prioridad a Dios en lo concreto de la vida como eran las opciones y
los mismos horarios…
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